El agua micelar ha pasado de ser un producto de culto para unos pocos expertos en belleza a convertirse en un básico para la mayoría de mujeres del mundo. A pasos lentos, pero certeros, ha sembrado la semilla de la necesitad. Devotas y amateurs coinciden: después de probarlo no hay marcha atrás. A continuación, descubrimos por qué un limpiador facial causa tanto revuelo.
Son muchas las razones por las qué podemos considerar el agua micelar LP10 «el básico de la belleza diaria». No irrita la dermis. Sirve para todo tipo de pieles. Es súper fácil de usar. ¿Curioso por saber más?
No irrita la dermis.
Al limpiarte con agua micelar LP10 evitas el contacto con el agua corriente, la cual muchas veces es la causante de irritación facial.
Sirve para todo tipo de pieles ¡Incluidas las pieles grasas!
El agua micelar LP10 ayuda a reducir el tamaño de los poros y, por tanto, regula la producción de sebo. El resultado una piel más suave y tersa.
¡Ahorra tiempo y dinero!
Antes, para una correcta limpieza del rostro debías usar al menos tres productos: desmaquilladora, tónico e hidratante. El agua micelar desmaquilla, tonifica e hidrata el rostro en un solo paso.
Sirve para ojos y labios.
Hasta la llegada del agua micelar al mercado debiamos comprar un producto especifico para cada área del rostro. Contorno de ojos, ojos, labios, frente y nariz. Cada área sensible del rostro requería un cuidado concreto. ¡Un lío! La ausencia de alcohol y de parabenos del agua micelar LP10 ha permitido limpiar todo tipo de zonas sensibles sin preocuparte de cambiar de producto. ¡Sigue ahorrando!
Y para concluir: ¡Es súper fácil de utilizar!